Se examina en este caso la corrección de la atención sanitaria dispensada a un paciente operado de apendicitis, que murió año y medio después de cáncer. A la vista de las pruebas practicadas, el TS confirma la valoración fáctica realizada por la Audiencia Nacional, en el sentido de que el cáncer no pudo haberse diagnosticado antes. Una vez más, se comprueba la importancia que en este tipo de supuestos tienen los informes periciales.