El 53% de la población activa del País Vasco esta asociada a una entidad de previsión social voluntaria. Las EPSV, que lograron en 1997 un patrimonio superior a los 870.000 millones de pesetas y prevén superar el billón de pesetas en 1998, han solicitado a las diputaciones vascas que incluyan una serie de nuevas prestaciones para el sector en la reforma del IRPF.