El BBVA anuncia su renuncia definitiva a la operación sobre Banca Nazionale de Lavoro (BNL), aunque obtendrá unas plusvalías cercanas a los 520 millones de euros al vender su participación del 14,75% en la entidad. La presión ejercida por la aseguradora Unipol y las trabas de diversos accionistas han podido con la OPA del banco español, que ha expresado por medio de un comunicado que "lamenta que, como consecuencia de la actuación de Unipol y sus aliados, los accionistas de la BNL no puedan beneficiarse de la única oferta hoy vigente que, al valor del cierre de ayer -por el jueves-, es económicamente más beneficiosa". El comunicado del BBVA va más allá en sus dudas sobre la operación, en el sentido de que, incluso, es posible que nunca llegue a cuajar tal oferta, que considera a merced de "la obtención de las autorizaciones pertinentes y de las garantías financieras requeridas por la ley". Y agrega que el BBVA "igualmente lamenta que estos hechos no permitan desarrollar el plan de negocio diseñado por BBVA para BNL, que suponía incluir a ese banco en un grupo de mayor solvencia y mejores ratings, además de comprometer inversiones significativas para mejorar sus capacidades comerciales y competitivas". Por su parte, Unipol ha confirmado que en septiembre lanzará una OPA sobre el 59,25% de BNL, por importe cercano a los 4.960 millones de euros. Para ello, realizará un aumento de capital de 2.500 millones de euros. La operación contará con la garantía de un consorcio de cinco bancos: Nomura, Deutsche Bank, BVNP Paribas, HVB y Credit Suisse Boston.
