En los próximos 20 años, las Administraciones públicas o entidades privadas se verán obligadas a desembolsar casi medio billón de pesetas para atender la demanda potencial de camas para la asistencia de la tercera edad. Arthur Andersen ha calculado, en un estudio, que el déficit de camas no llega en estos momentos a las 40.000. Tomando como referente el dinero de la Comunidad de Madrid, el coste de inversión que se ha calculado tiene previsto invertir en los próximos tres años con el fin de habilitar 8.500 nuevas plazas en este territorio. Se añaden gráfico sobre la evolución prevista de la demanda y tabla sobre las principales magnitudes.